Dolor de riñones. Causas y tratamientos de Dolor de riñones

El dolor en los riñones se define como una molestia o dolor en la zona corporal relacionada con la ubicación de los riñones. Esta ubicación está normalmente aislada a la espalda, pero puede variar entre personas. Concretamente, se suele sentir en la parte media o inferior de la espalda, y difundirse hacia los costados u otras áreas del cuerpo. En los casos más habituales, el dolor de riñones se suele relacionar con una infección, aunque también puede indicar la presencia de cálculos renales, lesión o enfermedad renal, en incluso relacionarse con la menstruación o el embarazo. 

Hablamos de infección renal cuando existe una infección bacteriana en uno o ambos riñones. Esta patología puede darse por distintas razones. En la mayor parte de los casos, existe también una infección en la vejiga no tratada o tratada de forma no apropiada. En otros casos, la infección puede deberse a cálculos renales o al uso de pruebas médicas que derivan en complicaciones secundarias, como una cistoscopia o cirugía del sistema urinario. Por último, también se puede haber estado en contacto con bacterias que acaben alojándose en los riñones. Se puede sospechar la existencia de infección renal cuando el paciente padece una micción frecuente, dolor y ardor al orinar y en el abdomen, tener la sensación de que la vejiga sigue llena después de la micción y pus y sangre en la orina. Puede ir acompañada de fiebre y vómito. 

En los cálculos renales, el dolor varía entre individuos, pero generalmente se describe como punzante, localizado y puede estar acompañado de sudor frío y debilitación. Su intensidad variará según las características de los cálculos, pudiendo ser desde inexistente hasta severo e inhabilitante. Sin embargo, los cálculos suelen evolucionar con el tiempo, y los síntomas se hacen eventualmente aparentes. Los cálculos pueden también acabar causando dichas infecciones, por lo cual es muy recomendable asistir a un especialista a la misma aparición de los síntomas. Su tratamiento dependerá, de nuevo, de las características de los cálculos. 

La enfermedad renal es la pérdida de función de los riñones a lo largo de los años, en cuyo caso se ve afectada en mayor o menor medida la capacidad excretora de nuestro cuerpo. Podemos sospechar que padecemos enfermedad renal cuando presentamos piel anormalmente oscura o clara, dolor óseo, susceptibilidad a hematomas o sangrado, sed excesiva, hipo frecuente, amenorrea, pérdida de peso, inapetencia, malestar general o vómitos. En este caso, también es especialmente necesario consultar a un especialista para iniciar cuanto antes un tratamiento especializado, dado que en muchos casos la enfermedad renal no se diagnostica hasta perdida gran parte de la función renal y, aunque no tiene cura, se pueden controlar sus síntomas.