¿Cuál es el tratamiento para la espina bífida?

Como la Espina Bífida no tiene curación, los tratamientos deben ir encaminados a reducir al mínimo las deformidades y maximizar las capacidades del niño. Así, en cuanto a la pérdida de movilidad, se debe enseñar al niño a usar ayudas técnicas para la marcha (ortesis, muletas, silla de ruedas...), para la pérdida de sensibilidad, cambios posturales para evitar úlceras, para la incontinencia de esfínteres usar pañales, sondas, laxantes, etc. Además  es muy  importante evitar la sobreprotección, potenciar las capacidades del paciente y ofrecerles la formación adecuada para que en la vida adulta puedan llevar una vida independiente personal, social y laboral.